Countries<Spain<Comunidad Valenciana<Bonrepós y Mirambell< Ermita de Sant Joan Baptista
The hermitage dedicated to San Juan Bautista is located in the urban center of Mirambell, next to the dry riverbed of the Carraixet. Its façade opens onto the collected Placeta de l'Ermita, while the body of the sacristy, attached to its head, falls to the street called Baixada de Carpesa.
Until 1525 the Islamic mosque of the Muslim population existed here, converted at that date into a Christian temple for the worship of the converted Moors. In 1685 the old temple was demolished to build the hermitage we know today, although throughout its history it has undergone several interventions that have changed its original appearance. Initially placed under the patronage of All Saints, it was not until 1885 when it was dedicated to San Juan Bautista.
With an elongated rectangular floor plan and plastered walls, the chapel is attached on both sides to private homes. Over the arched doorway with a brick archivolt and flanked by a reddish stone plinth there is a ceramic panel with an image of the saint and the inscription San Juan Bautista. Clavaris 1990.
The pediment ends in a straight cornice with ball ornaments at the ends and a large belfry with three openings: the upper one, smaller, is empty, while the two lower ones house two bells, both cast in 1947 and donated by the clavarios of that year, since the originals were lost during the Civil War. The larger one was baptized with the name of the titular saint, while the smaller one is called María del Pilar.
La ermita dedicada a San Juan Bautista se encuentra en el núcleo urbano de Mirambell, junto al cauce seco del Carraixet. Su fachada se abre a la recogida Placeta de l'Ermita, mientras que el cuerpo de la sacristía, adosado a su cabecera, recae a la calle llamada Baixada de Carpesa.
Hasta 1525 existía aquí la mezquita islámica de la población musulmana, convertida en esa fecha en templo cristiano para el culto de los moriscos convertidos. En el año 1685 se derribó ese viejo templo para edificar la ermita que ahora conocemos, aunque a lo largo de su historia ha sufrido diversas intervenciones que han modificado su aspecto original. Puesta en principio bajo la advocación de Todos los Santos, no fue hasta 1885 cuando se dedicó a San Juan Bautista.
De planta rectangular alargada y paramentos enlucidos, la ermita se halla adosada por ambos lados a viviendas particulares. Sobre la puerta en arco de formalete con archivolta de ladrillos y flanqueada por zócalo de piedra rojiza hay un panel cerámico con imagen del santo y la leyenda San Juan Bautista. Clavaris 1990.
El frontón remata en cornisa recta con adornos de bolas en sus extremos y amplia espadaña de tres huecos: el superior, más pequeño, está vacío, mientras que los dos inferiores albergan sendas campanas, ambas fundidas en 1947 y donadas por los clavarios de ese año, ya que las originales se perdieron durante la Guerra Civil. La de mayor tamaño fue bautizada con el nombre del santo titular, mientras que la pequeña es llamada María del Pilar.