Countries<Spain<Comunidad Valenciana<Burjassot< El Patio de los Silos
The Patio de los Silos, also known as the Patio de San Roque or simply as Los Silos, is a monument made up of a set of tanks used to store wheat for the consumption of the inhabitants of the city of Valencia and surrounding towns.
During the 16th century, the city of Valencia suffered various problems of wheat shortages due to the fact that the Kingdom of Valencia had a deficit in this product. The alternative was to promote the import of Sicilian wheat by sea, but the large quantities of wheat that reached the beach of El Grao could not be stored in the traditional botigas, or warehouses, due to their poor storage conditions. To avoid these problems, the city government (the Consell) decided to build three experimental silos in 1573, commissioned to the stonemason Sancho de Camino, to store the cereal and thus have a reserve in case of need, while at the same time making it possible to acquire wheat at the best price at source.
The choice of location was not a random decision, as the material of which the mound was made, in addition to the slightly higher altitude with respect to the capital, gave it more appropriate characteristics to keep the wheat in excellent condition for a longer period of time.
El Patio de los Silos, también conocido como Patio de San Roque o simplemente como Los Silos, es un monumento constituido por un conjunto de depósitos destinados a almacenar trigo para el consumo de los habitantes de la ciudad de Valencia y poblaciones de alrededor.
Durante el siglo XVI la ciudad de Valencia sufrió diversos problemas de desabastecimiento de trigo debido a que el Reino de Valencia era deficitario en este producto. La alternativa fue potenciar la importación de trigo siciliano por vía marítima, pero las grandes cantidades de trigo que llegaban a la playa de El Grao no podían ser almacenadas en las tradicionales botigas, o almacenes, debido a sus malas condiciones de almacenaje. Para evitar dichos problemas, el gobierno de la ciudad (el Consell) decidió construir de manera experimental en 1573 tres silos, encargados al cantero Sancho de Camino, para almacenar el cereal y así disponer de una reserva en caso de necesidad, al mismo tiempo que permitía adquirir trigo al mejor precio en origen.
La decisión del emplazamiento no fue al azar, ya que el material del que estaba compuesto el montículo, además de la altitud ligeramente más elevada respecto a la capital, le confería unas características más apropiadas para mantener en excelentes condiciones el trigo durante más tiempo.