Countries<Spain<Comunidad Valenciana<El Puig< La Cartuja de Ara Christi
It was built in 1585 by the Carthusian architect Fray Antonio Ortiz. Its rooms include the church, cells, main cloister, two smaller cloisters, chapter house, refectory, porter's lodge, vegetable garden and stables. It must have had various defensive structures and several towers that provided protection.
It was home to a community of Carthusian monks who depended on the Carthusian monastery of Porta-Coeli in Serra. During the time it was in operation as a religious building, many communities of monks, friars and nuns passed through its premises, and it is known that the last religious order to occupy the facilities were the Capuchin friars, who abandoned them at the end of the 1970s due to the ruinous state they were in.
The greatest looting in its history took place in 1808 during the war with the French by Napoleon's troops, who razed both the paintings and the ornaments inside. The church was exclaustrated in 1835, when the Community was dissolved, and was abandoned for a long period until it was restored.
In 1996 it was declared an Asset of Cultural Interest, with the category of monument.
Strolling through its different rooms, cloisters, chapels, courtyards, admiring the exquisite decoration of the dome of the church, the chapel of the dead. The sobriety of the building creates an atmosphere that invites us to relax and reflect.
Fue construida en 1585 por el arquitecto cartujo Fray Antonio Ortiz. Entre sus dependencias se encuentran la iglesia, celdas, claustro mayor, dos claustros menores, sala capitular, refectorio, portería, huerta y cuadras. Debió contar con diversas estructuras defensivas, y con varias torres que le daban protección.
En ella se instaló una comunidad de monjes cartujos dependientes de la Cartuja de Porta-Coeli, de Serra. Durante el tiempo que estuvo en funcionamiento como edificio religioso pasaron por sus dependencias muchas comunidades de monjes, frailes y religiosas, teniendo constancia que la última Orden Religiosa que ocupó las instalaciones fueron Frailes Capuchinos, que las abandonaron a finales de los 70 por el estado ruinoso que presentaba.
El mayor saqueo sufrido en su historia ocurrió en 1808 y con ocasión de la guerra con los franceses por parte de las tropas napoleónicas, quienes arrasaron tanto sus cuadros como los ornamentos del interior. Exclaustrada en 1835, cuando se disolvió la Comunidad, quedó abandonada por un largo periodo hasta que fue restaurada.
En 1996 fue declarada Bien de Interés Cultural, con categoría de monumento.
Paseando por sus diferentes dependencias, claustros, capillas, patios, admirando la exquisita decoración de la cúpula de la iglesia, la capilla de difuntos. La sobriedad del edificio crea una atmósfera que nos invita a la relajación y la reflexión.