Countries<Spain<Comunidad Valenciana<Fontanars dels Alforins< Hornos de Cal
During the XIX and XX centuries the production of lime was an eleconocido to be one of the last places to produce lime in the traditional way, since the last kilns were in operation until the beginning of the decade of the 80's of the last century. This represented the end point of a tradition of centuries that has left as a result the remains of more than fifty kilns scattered throughout the term.
Taking advantage of this rediscovered legacy, "La Ruta de la Cal" was designed, a proposal of five itineraries (for hiking and / or cycling) that allow to know this cultural, industrial and architectural heritage and, at the same time, enjoy the landscape of the Alforins and the rest of the attractions of the municipality and its municipal area.
The ovens used to consist of a cylindrical void, "the pot", open on top and had a front entrance very rarely covered by a porch, which sectioned the surrounding wall and delimiter of the crematory cavity itself. The flanks of the wall, on the sides of the entrance, are called bastions.
We found ovens with a stone masonry wall built with mortar and other more modern ones made or remade on the inside with fired tiles. On the other hand, the cylinder of the oven was sectioned by a front opening, flanked by two bastions, which delimits the cavity where, once the oven is "assembled", the wood will be introduced for burning.
Durante los siglos XIX y XX la producción de cal era un eleconocido para ser uno de los últimos lugares al producir la cal de forma tradicional, puesto que los últimos hornos estuvieron en funcionamiento hasta principios de la década de los 80 del siglo pasado. Esto representó el punto final de una tradición de siglos que ha dejado como resultado los restos de más de cincuenta hornos repartidos por todo el término.
Aprovechando este legado redescubierto se diseñó “La Ruta de la Cal”, una propuesta de cinco itinerarios (para senderismo y/o cicloturismo) que permiten conocer este patrimonio cultural, industrial y arquitectónico y, a la vegada, disfrutar del paisaje dels Alforins y del resto de atractivos del municipio y de su término.
Los hornos solían consistir en un vacío cilíndrico, “la olla”, abiertos por encima y que tenía una entrada frontal muy pocas veces cubierta por un porche, que secciona el muro circundante y delimitador de la propia cavidad crematoria. Los flancos del muro, a los lados de la entrada, se denominan baluartes.
Encontramos hornos con muro de fábrica de piedra obrada con mortero y otros más modernos hechos o rehechos por dentro con baldosa cocida. Por otro lado, el cilindro del horno se veía seccionado por una apertura frontal, flanqueada por dos baluartes, que delimita la cavidad por dónde, una vez “montado” el horno, se introducirá la leña para quemar.