Countries<Spain<Comunidad Valenciana<La Alcudia< Ermita de San Antonio Abad
The origin of this temple dates back to medieval times, specifically to the 14th century when the lord of the town, Pere de Montagut i Vilanova founded a hospital whose chapel was dedicated to San Antonio Abad. However, the chapel does not appear in documentary sources until the 16th century, and the date of 1699 that can be read on its façade must refer to some important refurbishment that gave it the appearance we know today.
Since then it has survived successive historical vicissitudes that have given it a wide range of functions, from prison to school. It has also been restored on several occasions, the last of which was in 2002, an intervention financed with funds from the Provincial Council and voluntary contributions from neighbours. It is currently in perfect condition, although in a decontextualised environment, as the hospital of which it formed part disappeared in the mid-19th century and became part of the urban growth of the town.
The façade is plain and simple with a beautifully gilded lintelled door, highly decorated with engravings and displaying the date 1699. Above it there is a modern ceramic altarpiece with an image of the saint - which replaced a niche image in a niche - and a wrought-iron lantern. Above it is a glazed rectangular window. The triangular pediment is truncated by the small belfry with its bell with the inscription Jesus, Joseph and Mary, a post-Civil War ensemble.
El origen de este templo se remonta a época medieval, concretamente al siglo XIV cuando el señor de la villa, Pere de Montagut i Vilanova fundó un hospital cuya capilla estaba dedicada a San Antonio Abad. Sin embargo, la ermita no aparece en las fuentes documentales hasta el siglo XVI, y la fecha de 1699 que puede leerse en su portada debe hacer referencia a alguna importante rehabilitación que le dio el aspecto que ahora conocemos.
Desde entonces ha sobrevivido a sucesivos avatares históricos que la han destinado a las más diversas funciones, desde cárcel a escuela. También ha sido restaurada en diversas ocasiones, la última de las relevantes en el año 2002, intervención costeada con fondos de la Diputación y aportaciones voluntarias de vecinos. Actualmente se encuentra en perfecto estado, aunque en un entorno descontextualizado al haber desaparecido a mediados del siglo XIX el hospital del que formaba parte y quedar englobada en el crecimiento urbano de la población.
La fachada es lisa y sencilla con puerta adintelada bellamente emplanchada en dorado, muy decorada con grabados y exhibiendo la fecha de 1699. Sobre ella hay un retablo cerámico moderno con imagen del santo -que reemplazó a una imagen de bulto en hornacina- y un farolillo de forja. Más arriba se abre una ventana rectangular acristalada. El frontón triangular queda truncado por la espadaña de tejadillo con su campana con la inscripción Jesús, José y María, conjunto posterior a la Guerra Civil.