Countries<Spain<Comunidad Valenciana<Llutxent< Castillo - Palacio de Luchente
The castle has a square floor plan, with four towers attached to the corners. The inner courtyard is the central point of the construction, with two floors. The facade stands out for the presence of two towers, topped with closed battlements, which gives different heights, as well as the superimposition of another later work topped in the same way. The walls are made of rammed earth and the floor slabs are made of vaults on the first floor and wooden coffered ceilings on the upper floors.
James I of Aragon donated the village of Luxente to D. Juan de Próxita in 1277, and it was his successors who built the castle, hence one of its names refers to this family.
It is considered that this castle, despite being built in the town center, has the highest part, set apart in order to control the entrance to the Albaida Valley from the coast; it had, therefore, a strategic role of surveillance, which was exercised in times of war. In fact, the first major reform took place after 1522 to repair the damage caused by the frustrated assault of the Agermanados, especially in its upper part, and other works were also carried out to add Renaissance elements. But later its construction was adapted to other uses, especially with the beginning of long periods of peace and stability in the area. In 1487, the castle was sold to Pedro Maza de Lizana, who, in time, began a remodeling that would transform the castle into a palace and turn it into a center of stately, economic and administrative life, which became the residence of the barons of Luchente. The interior of the building was substantially reformed, adding new rooms and incorporating new decorative elements more in keeping with the tastes of the time (flamboyant Gothic, which replaced the previous austerity). Meanwhile, the exterior appearance hardly changed. When Brianda Maza died without succession, the barony passed to Ramón Lladró, Lord of Castalla. In 1575 it was taken over by Pedro Maza Lladró, Marquis of Terranova, first Duke of Mandas. It later belonged to the Marquises of Dos Aguas who sold it at the end of the 19th century, at which time five independent dwellings were built inside.
In the last years of the first decade of the XXI century many works of improvement and restoration of the Castle-Palace were made, which could be shown to the public again at the end of 2010. Since then there have been many and diverse activities aimed at explaining the history of the castle-palace, its origins and the way of life in the palace through guided tours, dramatized visits and poetry recitals.
El castillo es de planta cuadrada, con cuatro torres adosadas a las esquinas. El patio interior es el punto central de la construcción, presentando el mismo dos alturas. La fachada destaca por la presencia de dos torres, rematadas con almenas cerradas, lo cual otorga diferentes alturas, así como la superposición de otra obra posterior rematada del mismo modo. Los muros son de tapial y los forjados están conformados en la planta baja por bóvedas y en las plantas superiores por artesonados de madera.
Jaime I de Aragón donó el pueblo de Luxente a D. Juan de Próxita en 1277, y fueron sus sucesores los que erigieron el castillo, de ahí que uno de sus nombres haga referencia a esta familia.
Se considera que este castillo y a pesar de estar erigido en el casco urbano, tiene la parte más alta, apartada con objeto controlar la entrada al Valle de Albaida desde la costa; tenía, pues, una función estratégica de vigilancia, que ejerció en los momentos de conflicto bélico. De hecho, la primera reforma de importancia tuvo lugar después de 1522 para reparar los desperfectos causados por el frustrado asalto de los agermanados, sobre todo en su parte superior, realizándose además otras obras que le añadirían elementos renacentistas. Pero más tarde su construcción fue adaptándose a otros usos, sobre todo al iniciarse largos períodos de paz y estabilidad en la zona. En 1487, el castillo fue vendido a Pedro Maza de Lizana, quien, con el tiempo, inicia una remodelación, que transformará el castillo en palacio y lo convertirá en un centro de vida señorial, económica y administrativa, que llegó a ser residencia de los barones de Luchente. Se reforma sustancialmente el aspecto interior del edificio, así, se añaden nuevas estancias y se incorporan nuevos elementos decorativos más acordes con los gustos de la época (gótico flamígero, que sustituye la austeridad anterior). Mientras, el aspecto exterior apenas cambia. Al morir Brianda Maza sin sucesión, la baronía pasó a Ramón Lladró, Señor de Castalla. En 1575 se hizo cargo de ella Pedro Maza Lladró, Marqués de Terranova, primer Duque de Mandas. Perteneció luego a los Marqueses de Dos Aguas quienes lo vendieron a finales del siglo XIX, momento en el cual, se habilitan en su interior cinco viviendas independientes.
En los últimos años de la primera década del siglo XXI se hicieron muchas obras de mejora y restauración del Castillo-Palacio que se pudieron mostrar al público de nuevo a finales de 2010. Desde entonces se han hecho muchas y diversas actividades destinadas a explicar la historia del castillo-palacio, sus orígenes y la forma de vida en el palacio mediante visitas guiadas, visitas teatralizadas y recitales poéticos.