Countries<Spain<Comunidad Valenciana<Tabernes Blanques< Ermita de la Mare de Déu dels Desamparats del Carraixet
Known as Ermita de la Mare de Déu dels Desamparats del Carraixet because it is located on the right bank of the ravine of the same name, it can be seen opposite the bridge that crosses it on the old Barcelona road (Calle Cardenal Benlloch), at the exit from Tavernes Blanques towards neighbouring Almàssera.
Its origins date back to 1447 and it was built by the Brotherhood of the Holy Innocent Martyrs of Valencia - founded in 1414 - to bury the executed and homeless (burials were carried out in what is now a garden in front of the church, on the other side of the road). This brotherhood has been perpetuated to the present day under the name of Virgen de los Desamparados del Carraixet and is currently responsible for the maintenance and care of the chapel, its surroundings and the organisation of its festivities.
The construction that we can see today, however, is recent, as it was erected in the 20th century to replace the primitive temple that was in ruins, and which belonged to Alboraia until 1926. Work began in 1932 and, halted during the Civil War, was completed in 1942. It is in an excellent state of conservation.
Conocida como Ermita de la Mare de Déu dels Desamparats del Carraixet por hallarse junto a la ribera derecha del barranco de ese nombre, puede verse frente al puente que lo cruza en la vieja carretera de Barcelona (calle Cardenal Benlloch), en la salida de Tavernes Blanques hacia la vecina Almàssera.
Su origen se remonta a 1447 y fue construida por la Cofradía de los Santos Mártires Inocentes de València -fundada en 1414- para enterrar junto a ella a los ajusticiados y desamparados (las inhumaciones se realizaban en lo que ahora es un jardín frente al templo, al otro lado de la carretera). Esta cofradía se ha perpetuado hasta nuestros días con el nombre de Virgen de los Desamparados del Carraixet y actualmente se encarga del mantenimiento y cuidado de la ermita, su entorno y organización de sus festejos.
La construcción que hoy podemos ver, sin embargo, es reciente, pues se levantó en el siglo XX sustituyendo al primitivo templo que estaba arruinado, y que perteneció a Alboraia hasta el año 1926. Las obras comenzaron en 1932 y, paralizadas durante la Guerra Civil, se concluyeron en 1942. Su estado de conservación es excelente.